Por Carlos A Beltrán.

Luis Ramos Reyes, abogado especializado en derecho administrativo, con una trayectoria de más de 27 años de servicio profesional en el estado Lara, fue designado magistrado del Tribunal Supremo de Justicia el 21 de julio de 2017 por la Asamblea Nacional de Venezuela, junto a un grupo de 32 magistrados más, contra quienes luego de su designación, se desató una fuerte persecución por parte de Nicolás Maduro, de los cuales tres de ellos fueron encarcelados y los demás tuvieron que fugarse y exiliarse fuera de Venezuela.

Ramos Reyes llegó a Miami hace un año y medio, y El Vocero News tuvo la oportunidad de hablar con él en entrevista concedida el día 5 de febrero de 2019. Visiblemente conmovido al relatarnos su historia en el exilio lejos de su familia, nos dijo estar muy satisfecho y optimista por como vienen ocurriendo las cosas en Venezuela actualmente, y espera que en muy poco tiempo su país vuelva a ser libre, para poder regresar a trabajar por él en el marco de una constitución legítima, y apoyado en las leyes de una nación transparente para juzgar y aplicar la justicia a quienes la hayan violado. Hoy el Dr. Ramos Reyes, un hombre recio de “llano y joropo” clama desde el exilio libertad para su país y envía un mensaje directo a Nicolás Maduro y a los militares de Venezuela, en video entrevista que pueden ver completa en www.elvoceronews.com y de la cual a continuación compartimos parte de ella.

¿Dr. Ramos de que parte de venezuela es usted?

Yo soy llanero, soy de Guasdualito, estado Apure. Llanero de montar a caballo y de recoger y arrear ganado todos los días en la mañana para ordeñar.

¿Cuánto tiempo lleva sirviendo al sistema judicial en Venezuela?

Ni un día. Es a partir del momento en que me juramentaron como magistrado el 21 de julio del 2017, y quedo al servicio de mi país en el sistema judicial. Nunca quise ocupar cargos públicos durante los 20 años que lleva la dictadura; ni un día quise servir al régimen por ninguna vía. En una oportunidad me designaron juez en el estado Lara, y me llegó la credencial un día viernes, y el día lunes le llevé la renuncia. No podía llegar a mi casa con un salario mal habido de un régimen dictatorial.

¿Qué pasó el 21 de julio de 2017 cuando usted fue designado como magistrado del TSJ.?

Ese fue un día en que la Asamblea nacional convoca a quienes habíamos concursado, luego de abierto el concurso de credenciales meses atrás. De verdad yo le oculté esto a toda mi familia, a mis hijos, a quienes hoy les pido perdón, lo cual me causa mucho dolor porque ha sido muy fuerte. Fui llamado un día antes y me comunicaron que había sido seleccionado como magistrado del Tribunal Supremo, y me fui para la ciudad de Caracas. Ese día iba a grabar un programa de televisión, y logré ser discreto con mi familia diciéndole que iba a grabar. Faltando cinco minutos para la juramentación llamé a mis hijos para informarles que había sido designado magistrado, les dije que yo iba aceptar el cargo, y les pedí que por favor se guardaran, para protegerlos.

¿Qué paso ese día, posterior a ese momento?

El momento de la juramentación fue como a la una de la tarde, y cuando salgo de hacerlo, Nicolás Maduro, el dictador, apareció en cadena nacional por radio y televisión dando instrucciones de 30 años de cárcel para nosotros los magistrados por el delito de traición a la patria, por habernos juramentado, ordenando la captura de todos. Detuvieron a tres de los magistrados, a uno de ellos, al Dr. Serpa lo enviaron por más de 30 días a los calabozos del SEBIN, a los otros dos les hicieron firmar su renuncia bajo amenaza de muerte. Yo regresé camuflajeado al estado Lara a esconderme, y fui el último magistrado en salir de Venezuela, luego de permanecer tres meses en resistencia. El resto de mis compañeros lograron salir a las 24 horas siguientes, para exiliarse en diferentes países.

¿Esa permanencia suya fue porque quiso hacer resistencia o porque no había tenido oportunidad de salir?

Yo tenía la oportunidad, sino que dimensioné que venían las elecciones de gobernadores, y habiéndose ganado la Asamblea Nacional, que a pesar del fraude los demócratas habíamos sacado 112 diputados, veía evidentemente que se iba a ganar en todo el país todas las gobernaciones, y en consecuencia era un duro golpe para el gobierno y podía caer la dictadura. No fue así, cambiaron y se robaron todo el proceso electoral, y vi el dominio del régimen de manera total, descarado y grotesco. Ante esta situación esperé el resultado electoral del 15 de agosto y una vez que se supo, como ya tenía previsto, monté mi plan para fugarme por la frontera con Cúcuta, Colombia, por el río, con ayuda de unas amistades y unos colombianos que conocían la zona. Casualmente la persona que me ayudó a pasar a Colombia y que me atendió en la ciudad de Cúcuta y me llevó a la cancillería para efectos de sellado del pasaporte y demás cosas, murió exactamente al año de todo esto. Me causó gran tristeza la noticia; Todo esto ha sido muy fuerte.

¿Después de casi dos años en el exilio, cómo se siente hoy?

Hoy me siento muy fortalecido y creo que el objetivo de nuestra causa y de nuestra lucha por la libertad del país, ya lo tenemos en un noventa y cinco por ciento logrado. Como magistrado empezamos de cero, y hemos logrado hacerle un juicio a Nicolás Maduro donde lo hemos sentenciado a 18 de años de prisión, en una condena de devolución de 35 millones de dólares por una parte, del dinero que recibió de la empresa Odebrecht, y por otra, el reintegro que tiene que pagarle a la república por todo el daño causado, por un valor de 35 mil millones de dólares, de obras que no se hicieron, y por la poca que lograron intentar hacer y que también se perdió.

¿Cómo realizaron ustedes ese juicio a Nicolás Maduro?

En Venezuela existe lo que es la ley de la informática. La realizamos vía internet por computadora, conectándonos, los magistrados que están exiliados en Colombia, Chile, Panamá y aquí en los Estados Unidos. Ya conectados la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, también hoy en el exilio, y quien es la competente constitucionalmente para el enjuiciamiento del presidente, en este caso del dictador, presentó una formal acusación, y de esa manera llevamos a cabo el juicio, condenándolo a 18 años de prisión.

¿Cómo pueden funcionar dos gobiernos ahora en Venezuela?

Primeramente, Juan Guaidó es el presidente constitucional de Venezuela; en derecho, eso se llama, reserva constitucional. Es el artículo 233 el que lo designa presidente de la república. Una vez que fueron anulados los procesos electorales, desconocidos por la comunidad internacional, provenientes de un proceso fraudulento, convocados por una asamblea constituyente que no es legal, que no fue convocada de conformidad con la constitución, que es írrita y espuria, evidentemente el proceso está totalmente viciado de nulidad absoluta, por mandato expreso de la constitución. Un proceso electoral presidencial que debía ser convocado en el último trimestre del año, Nicolás Maduro lo hizo en el mes de marzo para burlar la constitución, proceso realizado por fuera de los lapsos, se declara nulo. Una vez declarado nulo también se vence lo que es el lapso constitucional que se venció el 10 de enero de este año, y es ahí donde queda totalmente acéfala la presidencia de la república, y es donde entra a funcionar, como lo mencioné antes, lo que se llama reserva constitucional, legal, que es el artículo 233 que establece que el presidente de la Asamblea Nacional se encargará de la presidencia de la república. De manera que Juan Guaidó es el presidente constitucional de Venezuela, encargado, no es interino, hasta que lo supla un presidente electo.

A Link Youtube entrevista completa Magistrado Luis Ramos Reyes

https://www.youtube.com/watch?v=iW2qlaS-enA